viernes, 22 de febrero de 2013

Camino.

Al parecer llevo un año de retraso, pero no me siento culpable. Escribir es tal terapia, que nunca dejé de hacerlo, aunque entre una vez y otra pasara largo tiempo. Una vez vencida la ceguera, y dando rienda suelta al valor, decidí enfrentarme a lo que viniera en el camino. Y cuesta mucho darte cuenta, que para recorrer un buen camino, has de ir tú. El camino jamás viene a a ti. Pensar en no querer un camino de rutina vacía y de máscaras cada día, me hizo dar el primer paso, que es, creo yo, el más importante.

Mudarme a Barcelona, vivir 4 meses de locura, una locura que engloba tantísimo, que algún día, he de escribir unas memorias y escupir todo aquello que llegué a vivir. Cuatro meses intensos de descubrimientos y de mirar hacia dentro. Analizarse desde el mínimo prejuicio, posibilitando cualquier locura, cualquier sueño, cualquier objetivo, y entender, que es muy dificil entendernos a nosotros mismos, pero no imposible.

 El camino ajeno a mí, el de la propia vida y el de las vidas de los demás, se suma a las casualidades y a la belleza y complejidad que las caracteriza. Me río a carcajadas, me siento tan libre... Tan sanamente libre, que ni siquiera el darme cuenta de la manipulación y crueldad a la que somos sometidos por los poderosos, me merma el ánimo.

Soy de hierro, aunque llore y me hiera la crueldad a veces, aunque en noches como esta, me pregunte a gritos que sucederá mañana y como voy a pagar el alquiler el mes que viene. Soy capaz de todo, y para mi sorpresa he descubierto, que cuanta menos seguridad y estabilidad tengo, más libre y más feliz me siento. Ser capaz de vivir en la calle y ser capaz de tener un jacuzzi en uno de tus tres cuartos de aseo, son mi objetivo, vivirlo todo, perderlo todo... SABERLO TODO.

He decidido reciclar los malos sentimientos, aquellos que nos hacen que nos avergoncemos de nosotros mismos y nos provoquemos tal pérdida de tiempo con energías negativas o destructivas. Los que me rodean son tan buenos y tan malos como yo, le he dado una patada a la misantropía, para convertirla en egoismo, y sacar de los demás aportes que aumenten mis ideas para reflexionar. Yo los absuelvo si alguna vez me odiaron, me mintieron, me insultaron. Los compadezco y he decidido amarlos a todos. Lo que piensen, solo es producto de ellos y su circunstancia, no me importa una mierda, salvo que sean los más cercanos a mí, estos a los que sí tengo en cuenta, y sus opiniones pueden ridiculizar las mías.

Simplifico como puedo analisis y pensamientos que tengo sin darme cuenta, plasmo como quiero vivir mi vida, con lo que tengo, y con lo que me dan. Pienso en el camino, creo que mi mayor tesoro es que me da igual si el camino es corto o largo, fácil o difícil, lo que más valoro de mí, es que tengo unas ganas increibles de recorrerlo, y sé, que jamás voy a abandonar, aunque todos sepamos que nunca se puede decir "de este agua no beberé". Lo peor que podría pasarme es quedarme sola, y amigos míos, de eso ya he hecho prácticas.

Mi madre me me formó en su vientre por una casualidad de 1%, el resto tenía forma de Dispositivo IntraUterino (DIU), un porcentaje bajísimo y la dichosa probabilidad que endulza la vida, me dieron la vida. Se me ha regalado, no tengo nada que perder, y solo una manera de recorrer el camino...




A mi manera
http://www.youtube.com/watch?v=avGAe9EVkjc 

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